Este proyecto es un dejá vu pictoricista en el que retrato las soledades de seres ausentes atrapados en las pantallas de sus móviles, cautivos, que como en la caverna de Platón, viven en un universo distante y paralelo, almas condenadas a interpretar las sombras y las luces de sus artefactos como la única realidad a la que responden, la única verdad que les acompaña.
Crucifixión. Anthony van Dyck. La Ronda de Noche. Rembrand
Retrato ecuestre (Napoleón cruzando los Alpes. Jacques-Louis David)
Autorretrato. Vincent van Gogh. Mujer leyendo una carta. Johannes Vermeer
La huída a Egipto. El Greco
El caballero de la mano en el pecho. El Greco. Los embajadores. Hans Holbein el joven
Moisés con los Diez Mandamientos. Rembrand
Y tenía corazón. Enrique Simonet
Autorretrato. Alberto Durero